6 de Junio, 2025
Este 5 de junio, la banda Eterno Instante presentó su nuevo EP “Austral”, una obra que sentimos muy cercana y que tuvimos la suerte de escuchar antes de su lanzamiento oficial. Desde los primeros compases, Austral nos propone un recorrido emocional profundo, lleno de matices sonoros que invitan a pausar, escuchar con atención y conectar con lo esencial.
El EP transmite una búsqueda honesta de autenticidad, con una sensibilidad que se refleja tanto en las letras como en los arreglos. Hay una intención clara de explorar lo emocional desde la sutileza, dejando espacio para que cada canción respire y cobre vida propia. No se trata solo de música: Austral es una experiencia sensorial que logra instalarse en un rincón íntimo del oyente.
Uno de los temas que más nos conmovió fue “Sol de Mayo”. Tiene esa cualidad especial de las canciones que logran acariciar el alma sin necesidad de grandes artificios. Su estructura envolvente, casi hipnótica, va tejiendo una narrativa emocional que crece con cada escucha. Es un tema que brilla por su sensibilidad, por cómo se permite ser suave y poderoso al mismo tiempo.
Otra joya del EP es “Escudos”, que nos conquistó desde el primer acorde. Tiene una atmósfera cálida que se siente como un refugio. La instrumentación es sutil, muy bien cuidada, y cada elemento parece estar en su lugar justo para potenciar la emocionalidad del tema. Las voces tienen un protagonismo especial: transmiten cercanía, fragilidad y fuerza a partes iguales, generando un abrazo sonoro que nos envolvió por completo.
Lo más hermoso de Austral es que sentimos que encaja perfectamente con nuestro estilo musical y nuestra forma de ver la música: como un espacio de conexión, de introspección, de honestidad artística. Es un EP que no busca impresionar, sino emocionar, y en eso, Eterno Instante logra algo realmente valioso.
El EP transmite una búsqueda honesta de autenticidad, con una sensibilidad que se refleja tanto en las letras como en los arreglos. Hay una intención clara de explorar lo emocional desde la sutileza, dejando espacio para que cada canción respire y cobre vida propia. No se trata solo de música: Austral es una experiencia sensorial que logra instalarse en un rincón íntimo del oyente.
Uno de los temas que más nos conmovió fue “Sol de Mayo”. Tiene esa cualidad especial de las canciones que logran acariciar el alma sin necesidad de grandes artificios. Su estructura envolvente, casi hipnótica, va tejiendo una narrativa emocional que crece con cada escucha. Es un tema que brilla por su sensibilidad, por cómo se permite ser suave y poderoso al mismo tiempo.
Otra joya del EP es “Escudos”, que nos conquistó desde el primer acorde. Tiene una atmósfera cálida que se siente como un refugio. La instrumentación es sutil, muy bien cuidada, y cada elemento parece estar en su lugar justo para potenciar la emocionalidad del tema. Las voces tienen un protagonismo especial: transmiten cercanía, fragilidad y fuerza a partes iguales, generando un abrazo sonoro que nos envolvió por completo.
Lo más hermoso de Austral es que sentimos que encaja perfectamente con nuestro estilo musical y nuestra forma de ver la música: como un espacio de conexión, de introspección, de honestidad artística. Es un EP que no busca impresionar, sino emocionar, y en eso, Eterno Instante logra algo realmente valioso.
